Errabunda Mente: De turista en Morelia

Este 28 de diciembre del 2014, fue un buen día de bromas, muy tradicional en México por el día de los Santos Inocentes; tomé la decisión de visitar algunos de los sitios turísticos de Morelia, la capital del Estado de Michoacán de Ocampo, llamada antes Valladolid. La tarde se estaba retirando y tenía que apurarme para tomar la mayor cantidad de fotografías antes que la noche cayera, simplemente porque no me gusta usar el flash de la cámara fotográfica.

El primer lugar fue la Casa de José María Morelos y Pavón, la cual algunos historiadores dicen que no la visitó casi nunca porque quien realmente habitaba ahí era su hermana. Él se encontraba ejerciendo como sacerdote en las alejadas comunidades rurales.

Casa de Morelos, en Morelia, Michoacán

Después de capturar la imagen de la casa del Siervo de la Nación, caminé por la calle García Obeso, en dirección a la Casa Natal del Generalísimo Morelos, en el mismo sentido en que su madre iba, antes de que diera luz al futuro insurgente.

La noche rápidamente inundaba la ciudad, las luces de la ciudad encendidas estaban ya al igual que las de los automóviles que recorrían las calles del centro histórico de la antigua ciudad vallisoletana. Entré directamente al Museo Casa Natal y me encontré con una interesante exposición artística del Maestro Guillermo Andrade Franco, del Jardín del Arte de las Rosas. Pasé rápidamente el primer patio para ir al lugar donde según la leyenda nació el gran Morelos, no sin antes advertirme la señorita encargada de la seguridad de que no podía tomar fotos con flash.

El lugar de nacimiento del General Morelos

Lo emocionante de la Exposición "El Arte en Chatarra" del Maestro Guillermo Andrade Franco, es precisamente que utiliza chatarra metálica para hacer figuras relacionadas en su mayoría con la música, mostrándonos que la creación debe ser un acto de reutilización de los materiales además de la sensibilidad humana.

Así que los interesados en adquirir su obra, bien pueden contactarse con el artista en su página personal de facebook Urakúa o en su perfil https://www.facebook.com/guillermo.andradefranco

Después de estar ahí un pequeño rato observando las obras artísticas de la chatarra, salí rumbo al barrio de San Agustín. Las últimas luces del sol se estaban hundiendo en el horizonte. Los primero que hice fue mirar la Iglesia de San Agustín con sus luces encendidas y los últimos suspiros del astro rey.

Templo de San Agustín, en Morelia, Michoacán.

Enfrente de este edificio, se encuentra la popular calle Cerrada de San Agustín, donde por lo general hay músicos que deleitan con sus notas musicales a los turistas y morelianos que pasan por este lugar. Siempre hay mucha gente, en una calle de una sola cuadra, que conduce a la Plaza Benito Juárez y a la Plaza de Armas.

Cerrada de San Agustín

Después de caminar unos pasos, me encuentro en la Plaza de San Agustín que recientemente remodeló el Presidente Municipal de Morelia, quitándole los jardines y cometiendo ecocidio. Aún así, luce esplendorosa, con su bello Templo de San Agustín y a un costado el Convento, hoy convertido en la Casa del Estudiante "Isacc Arriaga".

Plaza y Templo de San Agustín, Morelia, Michoacán.

Templo de San Agustín, Morelia, Michoacán.

Me dio hambre caminar además de que soy muy glotón, así que en el Mercado de San Agustín me comí dos ricos tamales, uno de "verde" y otro de "rojo", así como un atole de canela.

Al satisfacer mi glotonería, caminé un rato en la Plaza de Armas, donde vi a un hombre salir de las entrañas del Infierno, llámese Planeta Tierra.

Para que no me atrapase ese ser del inframundo, caminé por la Avenida Madero hasta las puertas de Palacio de Gobierno, donde tomé una de las últimas fotos de mi recorrido por el centro de la ciudad de Morelia.