Nosotros los proles, Ustedes los Peña

Empezó con gran furor el espectáculo de la telenovela de la vida real de los Peña: mientras la hija Paulina Peña Pretelini llama a los críticos de su padre "...bola de pendejos, que forman parte de la prole...", su progenitor Enrique Peña Nieto, un día antes en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, no pudo hilvanar y dar coherencia a sus comentarios sobre los supuestos libros que ha leído, ni decir correctamente los nombres de los escritores y de los títulos.

Por supuesto que la hija ve a su padre como un Dios, y los mortales no deben de criticarlo, so pena de ser llamados "pendejos" y peor aún, recibir el insulto mayor, el de ser llamados "parte de la prole", palabra harto denigrante en su pensamiento, sinónimo de pobre. La hija de esa forma se venga de las afrentas que recibió su querido tutor, prominente hombre de letras que dicta cátedras en la mismísima Feria Internacional del Libro, situándose a la par de escritores que han pululado en dicho evento como los Premios Nobel de Literatura Saramago y García Márquez, aunque ni siquiera pueda emular al gran Cantinflas.

Así es la vida del México actual: ahora que creíamos que las clases sociales solo eran un invento de la fraseología marxista, de que éramos hombres que habíamos nacidos libres y con los mismos derechos y oportunidades, la hija de Peña Nieto nos regresa a la realidad por medio de un Twitter, de que somos parte de la "prole". Pobres pues, de la clase baja.

Mejor título no puede tener esta película de la vida real: "Nosotros los proles, Ustedes los Peña"